martes, 31 de mayo de 2011

¿Causan cáncer los móviles según la OMS?

Recientemente he visto en meneame.net la noticia de que la OMS ha catalogado la radiación de los móviles como posiblemente cancerígena. Esto me augura una nueva era de paranoia y oscurantismo sobre el tema, así que quisiera poner mi granito de arena para intentar aclarar lo que la OMS ha dicho realmente. 

Afortunadamente ya se me han adelantado en un maravilloso blog científico de la Cancer Research UK, que como es de esperar saben mucho del tema. El post en cuestión se titula World Health Organisation verdict on mobile phones and cancer y este post que estás leyendo es una traducción (muy) libre y reducida del mismo.

Primero aclarar que este organismo ya ha tratado este tema con anterioridad en su blog, con resultados negativos. La noticia de partida es que la Agencia de Investigación sobre el Cancer (IARC), que forma parte de la OMS, formó un grupo de 31 expertos para investigar la relación entre la radiación de los móviles y el cáncer. Su veredicto es que ese tipo de radiación debe ser incluida en el Grupo 2B de riesgo, que significa que puede (o no) causar cáncer en seres humanos. 


¿Qué implica el grupo 2B?

La OMS, a través de la IARC,  ha catalogado los posibles riesgos de cáncer en distintos grupos:

Grupo 1. Es el nivel más alto con cosas que muy probablemente causan cáncer. En él se encuentran el tabaco, el amianto y el alcohol. 

Grupo 2A. Este incluye cosas sobre las que son "probablemente cancerígenas para los humanos". No se ha probado su efecto en humanos, pero sí en animales. 

Grupo 2B. (Donde están ahora los móviles) significa que "es posible que sean cancerígenos). Esto significa que hay "evidencia limitada" de que algo pueda causar cáncer en personas, he incluso la evidencia en animales es "menor de lo suficiente". Es decir, que hay algún indicio de peligro pero no es en absoluto convincente. En este grupo se encuentran la mayoría de las cosas, incluyendo la carpintería y el cloroformo.

Grupo 3. Incluye las cosas que "no se pueden clasificar como cancerígenas para los humanos". Esto implica que no hay ningún indicio, habitualmente son cosas que prácticamente no se han estudiado.

Grupo 4. Aquí están las cosas que probablemente no causen cáncer en humanos. Como curiosidad decir que sólo hay un compuesto químico en este grupo, el  caprolactam


¿Qué dice la evidencia?

Hay muchos estudios sobre la posibilidad de que las ondas electromagnéticas de los móviles provoquen cáncer. Unos pocos artículos han encontrado alguna relación entre los teléfonos móviles y el riesgo de contraer cáncer, la mayoría del grupo Hardell. Por otro lado la inmensa mayoría de los artículos, incluyendo los de InterPhone y el estudio de la Danish Cancer Society (que analizó a 420,000 personas siendo el estudio más extenso hasta el momento), no encontraron relación alguna. 

También en 2009 se publicó un metaestudio (estudio hecho a partir del análisis de muchos estudios previos) titulado  Epidemiologic evidence on mobile phones and tumor risk: a review. Donde se encontraba el siguiente gráfico (tomado del artículo original de la Cancer Research UK) 



El primer gráfico hace alusión al efecto a corto plazo (menos de 5 años) y el segundo a largo plazo (más de cinco años). Los puntos reflejan los resultados de cada estudio, sí está por encima de la línea horizontal indicaría que el estudio refleja un incremento de los casos de cáncer por el uso del móvil, si está por debajo significaría que el uso del móvil reduce la probabilidad de contraer cáncer. Por otro lado Las barras verticales (barras de error) son muy importantes, porque dan el intervalo de confianza del estudio, si la barra cruza la línea horizontal eso quiere decir que el error estadístico es tan grande (o el efecto tan pequeño) que los resultados no se pueden considerarse concluyentes. 

Se ve claramente que de los 14 estudios sólo uno supera la línea horizontal teniendo en cuenta las barras de error. Finalmente los dos últimos puntos (a la derecha) reflejan el conjunto global de todos los estudios (el penúltimo) y todos los estudios menos el de Hardell, que es el único que da positivo. Está muy claro que los resultados no indican que haya riesgo. 

Conclusión

En el artículo de la Cancer Research UK podéis encontrar más información (en inglés) sobre los problemas de estas investigaciones, los posibles conflictos de interés y demás. 

Mi conclusión es la siguiente, si bien es cierto que la OMS ha aumentado el nivel de riesgo de los teléfonos móviles lo ha hecho a un nivel aún muy bajo, al mismo que se encuentra la carpintería. Hay muchos estudios al respecto y hasta el momento sólo unos pocos indican que hay algún indicio, la mayoría no han encontrado relación alguna. En otras ramas de la ciencia, como en la mía, esto significaría que los estudios positivos tienen algún problema y no pueden ser considerados concluyentes, así que hay que hacer más estudios y mientras creer a la mayoría. Como este es un tema muy importante entiendo que hay que investigar más y ser cautos, eso sí sin caer en la paranoia. 

Lo que es claro es que en el hipotético caso de que los móviles aumentaran el riesgo de cáncer lo harían en un nivel muy bajo, porque si no estos estudios serían realmente concluyentes (un análisis de 420,000 personas es una estadística muy buena).